Conocimos Jeste en París, que es el mejor lugar para conocer una marca parisina. Su fundadora, Virginie Alezra, una mujer calmada con un discurso muy articulado nos contó qué había detrás de su proyecto.
"Mi madre me ha enseñado que la limpieza, además de ser el gesto fundamental para una piel sana, es también un gesto con un fuerte valor simbólico".
En esa única frase nos estaba resumiendo Jeste. La madre de Virgine, Nadine Pomarède, es una prestigiosa dermatóloga francesa que le ha transmitido que los productos de limpieza son tan importantes como la manera de aplicarlos. Todo es bienestar.
Ella descubrió que las rutinas de limpieza solían estar mal controladas e incluso eran contraproducentes al dañar la barrera cutánea y, más concretamente, nuestra microbiota, las bacterias que viven en la piel y la protegen como una armadura invisible. Es decir, que nos limpiamos mal.
Por tanto, decidió desarrollar nuevos productos y nuevos gestos que permitieran repensar las rutinas de belleza: ¿por qué no usar un dentífrico sólido o un champú en polvo? Y lanzó Jeste, una marca que ha desarrollado con dermatólogos y con la ayuda de dentistas, farmacéuticos y botánicos.
El resultado son productos limpios, eficaces, naturales, veganos y responsables. Los productos de esta marca nacida en 2022 no solo limpian la piel del rostro, sino el cuero cabelludo y los dientes. Esto puede sonar aburrido: nada más lejos de la realidad.
Jeste habla de gestos.
-De los gestos que usamos para aplicarnos los productos, de esos movimientos cotidianos que cada día hacemos casi sin pensar. Ella propone que los hagamos pensando.
-De los gestos que podemos llevar a cabo para proteger nuestro entorno. Los productos están pensados para tener un impacto positivo para el medio ambiente y para nosotros mismos.
Jeste es cosmética y también es cómo se aplica esa cosmética.
Conoce a Virginie en este video.