Hay dos tipos de personas: las que siempre llevan el mismo perfume y las que tienen cinco frascos abiertos en el baño. Ambas están bien. Ambas se equivocan a veces. Porque elegir perfume no es fácil, pero tampoco es tan complicado como parece.
Lo difícil no es encontrar un perfume que huela bien. Lo difícil es encontrar uno que te represente. Que encaje con tu vida. Que no te canse al tercer día. Aquí va cómo hacerlo.
Empieza por tu piel, no por el frasco
El error más común: comprar un perfume porque el frasco es bonito, el nombre es aspiracional o tu amiga lo lleva y le queda genial. Tu amiga no tiene tu piel. Ni tu pH. Ni tu química corporal.
Un perfume huele diferente en cada persona. El mismo frasco, dos aromas distintos. Por eso las muestras existen. Por eso tienes que probarlo en TU piel y esperar. No cinco minutos. Una hora mínimo. Mejor tres.
Los perfumes tienen estructura: salida (lo primero que hueles), corazón (lo que viene después) y fondo (lo que queda al final). Juzgar un perfume por su salida es como juzgar una serie por el primer capítulo. A veces funciona. A veces te pierdes la mejor parte.
Truco: Aplica en la muñeca, no frotes (rompe las moléculas), espera. Si tras dos horas sigues queriendo olerlo, es tuyo.
Tu vida decide tu perfume (no al revés)
¿Trabajas en una oficina con aire acondicionado o al aire libre? ¿Sales de noche o te quedas en casa? ¿Vives en pijama o te arreglas cada día? Tu perfume tiene que encajar en tu rutina real.
- Para días largos y activos: frescos y discretos. Puro Lino huele a sábanas limpias. Sailing Day a brisa. Te acompañan sin molestar.
- Para noches y cenas: aquí puedes ir con todo. Marrakech Intense o Un jour sans fin tienen presencia. Se notan. Permanecen.
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Para todo: Puro Talco funciona a las 9h y a las 23h. Por algo es el más vendido de Laconicum.
Las familias que necesitas conocer
No necesitas ser experto. Solo entender lo básico.
- Cítricos: limón, bergamota. Frescos, energéticos, corta duración. Perfectos para verano y día. Puro Neroli es tu punto de partida.
- Florales: de suaves a intensos. La familia más versátil. Virēre mezcla cítricos, higuera y té verde. Evoluciona en tu piel.
- Amaderados: cedro, sándalo. Carácter y profundidad. Jazz Club huele a ron, tabaco y cuero. No es para pasar desapercibida.
- Orientales: vainilla, ámbar. Sensuales y persistentes. Caldo Gourmand es dulce, cálido, adictivo.
- Verdes: té, musgo, hierba. Naturaleza real. From The Garden huele a tomates verdes y tierra mojada.
- Atalcados: iris, violeta. Elegancia reconfortante. Blanc Poudre es sensual e inocente a la vez.
EDT o EDP: no es lo mismo
- Eau de Toilette: ligero, 2-4 horas, día a día. Puedes reaplicar.
- Eau de Parfum: Intenso, 6-8 horas, ocasiones especiales (o no, tú decides).
Muchas fragancias existen en ambas. Puro Talco, Puro Lino, Puro Neroli. La misma fragancia, dos intensidades. Elige según el momento.
Qué no hacer al elegir
- No oler más de 4 seguidos: tu nariz se satura. Después del cuarto, ya no distingues nada.
- No comprar el primer día: prueba, vive con él unas horas, vuelve al día siguiente si sigues convencida.
- No frotar las muñecas: ese gesto típico rompe la fragancia. Aplica y deja secar.
- No usar el mismo perfume siempre: si no cambias de ropa en julio e invierno, ¿por qué el mismo perfume?
Según tu personalidad (si quieres orientación)
- Eres práctica y directa: cítricos o atalayados. Puro Lino huele a limpio. Punto.
- Eres curiosa: necesitas variedad. Osmarine es diferente cada vez que lo hueles. Shifumi es un cítrico nocturno (sí, existen).
- Eres sofisticada: florales complejos u orientales. Virēre evoluciona en tu piel durante horas.
- Eres natural: verdes y aromáticos. When The Rain Stops huele a lluvia sobre tierra seca.
Pero estas son pistas, no leyes. Si eres práctica y te enamoras de un oriental intenso, adelante.
La verdad sobre elegir perfume
No existe "el perfume perfecto". Existen perfumes perfectos para momentos. Uno fresco para la mañana. Uno amaderado para la noche. Uno especial para cuando quieres sentirte distinta.
La clave: prueba en tu piel, dale tiempo, confía en tu instinto. Si después de tres horas sigues queriendo olerlo, es tuyo. Si no, siguiente.
Y si después de leer esto sigues perdida, escríbenos a hola@laconicum.com o ven a Piamonte, 21 en Madrid. A veces la mejor recomendación no sale de un blog. Sale de oler.
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Por: Anabel Vázquez
co-fundadora de Laconicum
