Volvieron Las Chicas Gilmore (para nosotras nunca se fueron), volvieron los bolsos de cuentas y las perlas de la abuela, volvieron los polvos de sol, las sandalias de planta cuadrada, volvió David Lynch, el llamarnos "amiga" y hasta las tiras de blanqueamiento dental. Pero lo que no esperábamos, era que volvieran la espuma de cabello, los autobronceadores y los kajal. Nadie hubiese apostado por ellos, pero a diferencia de los crop-top, son gratas sorpresas que han sabido volver ubicándose en 2022.
La espuma de cabello ha vuelto
Jamás pensamos que diríamos esta frase, pero ha vuelto y lo decimos con la cabeza muy alta y con mucho volumen. Ya no es la espuma del rizo plastificado, ni la de los mechones tiesos de los dosmiles. No es la que parece nata montada y huele a peluquería de los ochenta. My Nanna's Mousse es la reinvención de todo eso a manos de Larry King y es ligera, natural y no se nota. Se aplica en el cabello mojado para, después, peinar con cepillo y secador o directamente con difusor. Define la forma de tu cabello (o la que tú quieras darle) y da volumen y densidad pero ni a la vista ni al tacto pareces llevar nada.
"Eso es lo que me fascina, que lo toco y no noto que lleve nada, pero yo, que tengo el cabello fino y sin volumen, parece que tengo el doble, y me define una onda surfera natural increíble". María A., Prensa y RRSS
Los autobronceadores ya no son un drama
Es una cosa antigua, naranja, desigual, incluso un poco hortera. La palabra autobronceador nos suena a todo eso. Suena cabina, a Valentino Garabani, a Marbella y al bochorno exagerado de un capítulo de Friends. Pero no, Self Tanning Foam de Mimitika no es nada de eso; es moderno, sutil, natural, sin manchas y apetecible. Lo bautizamos como "el autobronceador sin drama" porque es la conclusión a la que llegamos todas después de probarlo: no deja manchas, es muy fácil de aplicar, no tiende a naranja sino al bronceado natural que cogería tu piel, y no huele a químicos, huele a violetas.
Los kajal, la vuelta del lápiz de toda la vida