Clara Laguna coge un avión con un Dior desafiando a la mismísima Filomena (el temporal con el que nos recibió 2021) para realizar un editorial para la revista Traveler. El Dior es exquisito, y ella consigue introducirlo en una revista de viajes y estilo de vida con la misma soltura y coherencia con la que lo haría la revista de moda más afamada del planeta. Lo mismo sucede con la belleza: Clara prueba y vuelve a probar y busca la historia detrás del producto, a ser posible una de viajes, lo mete en su maleta y a volar. El último destino fue Tánger, Marrakech y Chefchaouen de la mano de Salima Issaoui, creadora de Uzza. Habrá muchos más, Mientras tanto, escoge un perfume cítrico, alguno con "toques de bebé", son los que le hacen feliz, o alguno más especial que le hace viajar al cerrar los ojos.
1. Tu producto Laconicum favorito.
Sin duda esta crema de Uzza para pieles secas, Sandstorm. Desde que la probé la utilizo compulsivamente, varias veces al día. A priori no era mi ‘cup of tea’, por la textura algo gruesa y ausencia de aroma, pero me deja la piel tan confortable que ya no puedo vivir sin ella.
2. Qué es lo más friki que te has comprado.
Mmm... Creo que no considero ‘friki’ nada de lo que me compro, pero quizá es porque estoy muy metida en esto y ya he perdido la perspectiva. No sé, ¿un spray refrescante de pies? Me chifla todo lo relacionado con los pies. ¿Una crema alisadora de contorno de labios? La verdad es que era una maravilla (de Clinique) y la echo de menos, no sé si la siguen haciendo...
3. Una manía beauty en tu rutina.
Todas. Yo no las veo como manías (desmaquillarse a diario es buena costumbre, no manía, ¿no?), sino como disfrute. Si no estoy agotada –o, a veces, precisamente porque lo estoy y me descansa hacer el ritual– me gusta dedicarme un buen rato y sacar todo el arsenal, especialmente por la noche. Por el día me cuesta salir de casa sin contorno de ojos, quitaojeras, un pelín de sombra... Para el cuerpo soy más perezosa y en tema cabello tampoco me complico mucho. Las mascarillas oclusivas no me van mucho, me agobio. Tal vez como manía podría decir que no puedo vivir ni viajar sin mi cepillito de cejas. O que me gusta aclarar con agua después del agua micelar o la leche desmaquillante, aunque no sea necesario.
4. Un producto que no sepas qué es y te dé vergüenza preguntar.
No soy nada vergonzosa para preguntar y menos si es sobre algo de belleza.
5. Si llegas tarde a casa, lo más probable es:
Ninguna de las 3, pero si tengo que elegir sería la 2. Eso sí, ahora tengo una toallita lavable y reutilizable, no me mata (prefiero usar las manos) pero ya dije adiós para siempre a las de un solo uso.
6. Qué producto o truco arregla un día de mala cara.
Un buen masaje con aceite y un rodillo de jade o un gua sha, combinado con una bruma del estilo de OSA Water Mist de Bioeffect y un poquito de iluminador en lugares estratégicos.
7. Tu aroma favorito y uno que no soportes.
En cuestión de perfumes soy muy infiel y quizá un poco básica, me gustan los cítricos y florales, aunque según y cómo un empolvado me puede gustar también. Mis favoritos últimamente son Le Temps des Rêves de Goutal y Sun Song de Vuitton, ambos tienen un toque a bebé que me hace muy feliz. Un aroma que no soporte… No sé si soy tan radical, pero no me van mucho la vainilla, el coco, el oud, el anís… pero siempre depende de quién lo lleve, claro.
8. Un truco de maquillaje infalible.
Si hablamos de resultados, menos es más, a no ser que estés en manos expertas o que lo hagas por pura diversión (que eso está muy bien también).
9. En un bad hair day, ¿qué haces?
10. El último capricho beauty que te has dado.
Un gel corporal de Kiehl’s con olor a cilantro.