A los niños y niñas les gusta construir castillos de arena y tirarse a bomba en las piscinas. No les gusta la protección solar. Babytika les gustará. Y a sus padres, también. Ellos, además, merecen su propia protección. Faltaría más. A los más pequeños les gustará su aroma, que se extiende bien y que no deja manchas blancas. A los mayores, que tiene alta protección contra UVA y UVB SPF 50+ (amplio espectro). Su fórmula contiene una mezcla única de filtros orgánicos y óxido de zinc (filtro mineral). A todos les gustará lo amable (gracias a la flor de malvavisco) que es con la piel.
Mimitika ha tardado cuatro años en formular este producto. Al final, ha logrado lo que quería: una fórmula diseñada para las pieles más sensibles, hasta para la de los recién nacidos. Pueden usarla las pieles atópicas y frágiles. Está dermatológicamente testado. Toda seguridad es poca. Ahora sí, vamos a la playa.