Un bálsamo de los de antes. Un cacao, como le hemos llamado mucho tiempo antes de que fuéramos todos tan modernos. Hasta su aspecto es retro y, a veces, necesitamos el refugio del pasado.
Este bálsamo de labios es de la marca Benamôr, muy unida a la cultura de Portugal. Esta casanació en los años 20 y entre sus admiradores estaba la mismísima...
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Un bálsamo de los de antes. Un cacao, como le hemos llamado mucho tiempo antes de que fuéramos todos tan modernos. Hasta su aspecto es retro y, a veces, necesitamos el refugio del pasado.
Este bálsamo de labios es de la marca Benamôr, muy unida a la cultura de Portugal. Esta casanació en los años 20 y entre sus admiradores estaba la mismísima reina de Portugal, Amelia. Ella concedió a Benamôr el título de "Proveedor Real". No todos los días nos cuidamos los labios con una marca que ha sido Proveedor Real.
Este bálsamo es muy rico e hidratante. Su fórmula contiene manteca de karité, parafina vegetal y nutre de manera instantánea. Es un bálsamo que sirve para nutrir los labios, nada más y nada menos. No da color, no tiene un formato extraño, no viene de ningún lugar exótico. Y todo eso nos parece muy bien.
Packaging precioso. El bálsamo es correcto sin más. Echo en falta que sea algo más untuoso, con más ceras, para que dure más en el labio y sea menos aceitoso. Hidrata, pero hay que... ver másreaplicarlo con frecuencia. Ideal para llevar en el bolso y neceser. ver menos
Me gusta mucho. Es muy hidratante pero no es graso ni pesado en los labios. Los tengo muy secos y con la mascarilla los tenía agrietados. El bálsamo me ha mejorado mucho la piel de... ver máslos labios, estoy encantada y volveré a comprarlo ver menos
Para nosotros, la sostenibilidad es querer hacerlo bien. Así, en general. Querer ser respetuosos con el entorno, con la comunidad en la que vivimos y entre nosotros. Es un camino largo, costoso y también irrenunciable.
Para nosotros, la sostenibilidad es querer hacerlo bien. Así, en general. Querer ser respetuosos con el entorno, con la comunidad en la que vivimos y entre nosotros. Es un camino largo, costoso y también irrenunciable.